domingo, 30 de octubre de 2011

Autorretrato doble **

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Autores: Pilar Campos, Carlos Rod.
Intérpretes: Jesús Barranco, Raúl Marcos.
Dirección, iluminación y espacio: Óscar G. Villegas.
Teatro: La Abadía. (26.10.2011)
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Los dos, hombre y mujer

En un pequeño espacio del escenario, al entrar nos intrigan estos dos personajes ante una mesita y cajas apiladas. Su aspecto nos desconcierta, y durante las acciones, levemente se convertirán en hombre o en mujer; alejados o cercanos a la transexualidad. En el programa de mano se han escrito unas bellas líneas que nos acercan: “Nacimos viejos. Enfermos. Con todo el pasado por delante. La juventud nos espera. Somos como ellas. Y somos ellas”.
    Las luces, entre las tinieblas o el enrojecimiento, van reviviendo en sus palabras los tiempos pasados; historias familiares o internas. En algunos momentos fingen, los actores, los personajes pertenecientes a los recuerdos. Y en la mayor parte del los textos, hablan en tercera persona, con la fantasía y la frontera. Relatos –conocidos o no- en ese genial procedimiento de Cortazar, con sus pequeñas historias y breves conversaciones, con una rica calidad literaria, sensible, de sus autores, Pilar Campos y Carlos Rod.
    La teatralidad de estos textos, es posible gracias a la dramaturgia, rica y formidable, que crea el director Óscar G. Villegas.
    En buena parte de la representación, van obteniendo de las usadas cajas de cartón, una multitud de pequeñitos cachiperres: figurillas de madera o barro, tazas, caja de música, tenedores, caracola, o la figura kitch coloreada de un buen Jesús. Irán colocándolos de uno en uno, separadamente, y mientras hablan, en orden variable. No tienen prisa. Les gusta moverlos como a un ejército de soldados de plomo; entretenimiento en formar diferentes figuras, tal vez árbol, casa o -siempre por el suelo-, el dibujo de una rayuela.
    Va mirando el público a estos personajes de dudas, dolores o frustraciones; aunque entre palabras y acciones se comportan como dos lúdicos muchachos. Hacen una gran interpretación Jesús Barranco y Raúl Marcos en sus voces y expresiones, con inteligencia de gestos y vestimentas. Calientes textos que seducen durante cerca de una hora.
Enrique Centeno

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